La medida se adoptó la semana pasada tras recibir la orden judicial. Personal de la Policía de Baradero sacó a quienes desde hacía años habían tomado el lugar que le corresponde a trenes.

“La semana pasada recibimos una orden de desalojo a nivel judicial y no quedó nadie”, explicó el comisario Gastón Cabrera. Para evitar una nueva toma, el municipio hizo un cerramiento del lugar.

“El que está donde no tiene que estar, que sepa que acá en Baradero eso se terminó”, agregó.